Hoy me gustaría compartir contigo una de mis ideas de negocio frustradas, una empresa de bicimensajeria.
Y digo idea de negocio frustrada porque he tenido sobre la mesa esta idea durante años, muchos años.
De hecho, tuve una asignatura en la que teníamos que desarrollar un plan de empresa y la hice sobre este tema, cuando aún no había apenas empresas de bicimensajería en España.
Incluso mi trabajo de fin de Máster fue sobre este tema.
Ya sé que hoy en día ver a alguien sobre una bicicleta repartiendo comida o cualquier otra cosa es bastante habitual, sobre todo con la llegada de plataformas del estilo de Glovo y similares, pero aún hay oportunidades de negocio dentro de este concepto, incluso sin depender de grandes jugadores.
Ya sé que no es un negocio online, como acostumbro a traer por el podcast, pero igualmente puede que te interese o que conozcas a alguien que le pueda interesar.
Para empezar, la demanda de este tipo de servicios está en el ojo del huracán. Por un lado tenemos el negocio de mensajeria, que prácticamente no da abasto para repartir todas las entregas online.
Además, está el llamado asunto del reparto de última milla, o lo que es lo mismo, el último tramo del reparto de los paquetes, algo complicado por temas como el aparcamiento, contaminación y restricciones de vehículos en según qué zonas.
He estudiado lo que les ha ido funcionando a los diversos negocios de bicimensajerías en España y podríamos plantear varios tipos de negocio según su enfoque:
Negocio de recadería y envíos de pequeños comercios en ciudades: Muchas de las bicimensajerias que conozco comenzaron así en sus inicios. Aquí tocará patearse las calles en busca de clientes, además de tener en cuenta que habrá que educar a los comercios en algo relativamente novedoso. Pero creo que es el momento ideal, ya que entre la competencia con los grandes ecommerce y las limitaciones de movilidad que estamos viviendo en estos momentos, este tipo de servicios pueden ser la salvación de muchas pequeñas tiendas.
Aquí podríamos involucrar a muchos tipos de negocios: pastelerías, tintorerías, pequeñas tiendas de ultramarinos… aunque como te digo, el paso más complicado es el de implicar a la tienda en el proceso, ya que para estos comercios supondría tener que iniciar un pequeño proceso de reconversión para poder vender a distancia, ya sea online o por teléfono.
Y aquí es donde surgen incluso dos ideas extra de monetización: Por un lado, podríamos plantear a las tiendas la creación de un ecommerce para transformarlas definitivamente. Si no lo acaban de ver claro, podríamos incluso crear nuestra propia plataforma de ecommerce local donde todos los comercios a los que ofrezcamos la opción de reparto se les incluya, llevando nosotros su gestión a cambio de un precio, ya sea a comisión por venta o directamente una cantidad fija al mes.
Asociación con plataformas de mensajería tradicional: Con esta vertiente es donde estoy viendo que las bicimensajerías están logrando crecer bastante. A las grandes empresas del sector (Seur, DHL, etc.) les interesa promocionarse como empresas ecológicas. Además, actualmente la mayor parte de estas empresas contratan directamente a autónomos, por lo que ofreciendo una colaboración les estamos aportando un extra que no está al alcance de cualquiera.
Trabajar para las nuevas plataformas: Esta es la opción que quizá menos me gusta, aunque también es por falta de conocimiento de primera mano. Y digo que es la que menos me gusta porque con ella pierdes tu autonomía, pero igualmente conviene tenerla en cuenta. Sería interesante entrevistar a algún trabajador de Glovo, Deliveroo o similares para que nos cuente su experiencia de primera mano.
Quizá la opción ganadora sea la de combinar varias de estas opciones. Muchas de las bicimensajerias que conozco así lo hacen y no les va nada mal.
Ya sé que no es un negocio demasiado escalable y es exigente tanto en tiempo como en físico, pero que quieres que te diga… a mí me encantaba la idea de ganarme la vida montando en bici repartiendo paquetes, por lo que, más allá del dinero… este tipo de negocios son para disfrutarlos (como deberían de serlo todos).
¿Cuánto cuesta montar una bicimensajeria?
Si te preguntas cuanto puede costar montar una empresa de bicimensajeria, aquí van algunas opciones.
Por un lado, está el tema de la principal herramienta, la bicicleta. Se suelen utilizar las llamadas cargo-bikes, y el modelo más popular (Bullit) ronda los 3.000 €.
Si quieres algo con mayor capacidad de carga, pero más lento puedes comprar un triciclo de carga. Dependiendo de dónde lo compres los precios pueden variar mucho, pero su precio normalmente se sitúa entre los 5.000 y los 10.000 €.
A parte, necesitarás alquilar un espacio de almacenaje a modo de centro logístico, aunque ahora mismo puedes conseguir el alquiler de un pequeño almacén por un precio bastante ajustado.
Podríamos hablar de otros gastos a mayores, pero en general (y para tratarse de un negocio offline) sus costes son bastante ajustados.
Vuelvo a repetir, es un negocio muy demandante en tiempo y en esfuerzo, pero que quieres que te diga… si tuviera que montar un negocio offline quizá me sacaría de una vez por todas la espinita que me quedó de cuando pude hacerlo y no di el paso.