Fernaco. Facturar 10.000 dólares al mes vendiendo portalápices

En estos tiempos donde lo digital manda, el lápiz y el papel aún siguen teniendo su hueco entre aquellos que nunca renunciarían al placer de sentarse a escribir a la antigua usanza. Pero ya sea por pasión o por imposición, lo cierto es que de alguna forma nunca nos hemos separado del viejo método de escritura. Para guardar los utensilios se suele utilizar un portalápices, y la gente de Fernaco nos ofrece su particular alternativa.

Buscando ideas de negocio sin necesidad de pasión

El caso que te traigo hoy es un poco diferente al resto de los que suelo comentar, ya que ni hay pasión detrás de él ni tampoco gran innovación. Aún así se trata de un negocio rentable y nos servirá para ver como hay más formas de llegar a crear un negocio que las que te suelo comentar.

Ricardo Fernández es el creador de Fernaco, una marca que vende únicamente portalápices en Amazon. La verdad es que el producto de hoy no tiene demasiado misterio. Es un portalápices cuya única particularidad es que está fabricado de silicona y, por lo tanto, es completamente flexible. El caso es que no es nada nuevo. Si vas mismamente a Aliexpress puedes encontrar exactamente el mismo modelo que vende Ricardo. De hecho, lo que me sorprende es que no le ha aplicado ningún tipo de branding a su producto. Y aunque te lo esté pintado todo tan negro, a Ricardo le va estupendamente, ya que vende unos 10000 dólares mensuales en Amazon (ojo, su beneficio ronda el 20-30%, tenlo en cuenta).

No creas que Ricardo es una especie de friki de los portalápices. Se topó con esta idea analizando búsquedas de palabras clave en Amazon y vio la oportunidad de hacer negocio. Es un caso interesante para que veamos que también hay vida más allá de la pasión y la innovación. A veces solo se trata de encontrar una oportunidad y aprovecharla.

Aciertos y errores

Ricardo tenía claro que quería probar a hacer negocio en Amazon FBA (te hablé hace varios episodios sobre el tema) así que, tras cursar varios cursos de varios gurús de la plataforma, al fin se lanzó. Empezó a encargar muestras de portalápices a varios proveedores de Alibaba hasta que al final se decidió por un modelo y encargó las primeras 500 unidades.

Aquí vino su primer error, ya que no tuvo en cuenta el color de los productos, y los modelos que le vendieron tenían colores un tanto llamativos (rosa y verde fosforito). Se dio pronto cuenta del error ya que, a pesar de tener buenas fotos, unos textos trabajados y haber invertido en publicidad, apenas vendía unos pocos portalápices.

Los propios clientes le demandaban colores más “serios” y acordes a su escritorio. Buscando lo que hacía la competencia se dio cuenta de que el color más usado era el negro, por lo que encargó otros 300 portalápices esta vez apostándolo todo al negro.

Parece que dio con la tecla, ya que comenzó a vender bastantes unidades pronto. Visto que el problema era el color, Ricardo se animó a probar con otra gama de colores (también del ámbito más “formal”) y encargó 250 unidades en blanco y 150 unidades en gris.

Actualmente le va bastante bien (factura 10000 dólares al mes) y ya está pensando en ampliar su cartera de negocios dentro del nicho de productos de oficina.

Aprendizajes del caso Fernaco

Ya sé que el caso de hoy es algo diferente y no estamos viendo como alguien resuelve algún problema con algún tipo de innovación, pero creo que igualmente puede servirnos tanto de inspiración como para obtener algunos aprendizajes:

Adapta tu diseño a tu público objetivo: Ricardo se “columpió” al no dar importancia a algo tan clave como es el color de un producto. Quizá pecó de no estudiar a su buyer persona de forma previa y ver que es un tipo de público que demanda productos más elegantes y serios. Ojo, que los colores no tienen la culpa (no tengo nada en contra del rosa ni del verde fosforito) simplemente es que no encajaban con ese público. Seguramente a ti también te habrá pasado que quizá hayas encontrado cuya funcionalidad era perfecta para tus necesidades, pero el simple hecho de tener un diseño que no te gustase hiciese que no lo comprases.

Hay vida más allá de la pasión: Ya sabes que soy un fiel defensor de la pasión en los negocios, pero entiendo que también hay alternativas. De hecho, muchísimos emprendedores no sienten pasión por los productos o servicios que venden y tienen un negocio que les funciona y les hace felices. Con esto te quiero decir que tampoco debemos estar cerrados a ideas que no nos apasionen. Otra cosa es que no estuvieran de acuerdo con nuestros valores o simplemente detestásemos el trabajo que implica ponerlo en marcha. Si es así, será complicado mantenerlo en el tiempo.

Amazon FBA, plataforma para testear ideas: Como te hablé el otro día, me encanta Amazon FBA y creo que puede utilizarse para probar ideas de negocio. Una vez hayas dado en el clavo con algún producto, te puedes plantear trasladar tu negocio a tu propia web (como siempre recomiendo) pero igualmente se puede utilizar para ver si existe demanda para el producto que tienes en mente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *