Hoy te traigo una de esas ideas que me gustan mucho por dos motivos. El primero es que es muy simple y no se necesita ser un ingeniero de la Nasa para crear algo así, y el segundo es que viene a reinventar algo muy tradicional y cargado de pequeños problemas. Te estoy hablando de las típicas cubiteras que seguramente tendrás en tu congelador. ¿Te has parado a pensar alguna vez en el proceso de fabricar hielo y todo lo que conlleva?
Para empezar está el tema de llenar la cubitera. Es un proceso en el que casi siempre acabaremos tirando agua por todos lados y encima muchos de los huecos quedarán a medio rellenar.
Luego, cuando la metemos en el congelador, el hielo que se forme estará expuesto a olores del resto de alimentos que estén allí guardados, así como a bacterias y todo lo que pille.
Y ya no hablemos a la hora de sacar los hielos. Golpetazo tras golpetazo para acabar con los cubitos en el fregadero o donde caigan. De todo menos higiénico.
La gente de Icebreaker nos propone un nuevo producto que pretende facilitarnos este proceso. Veamos en qué consiste su Icebreaker Pop.
Icebreaker
Antes de nada me gustaría mencionar que no es el primer producto que la empresa Icebreaker produce en torno a la creación de cubitos de hielo. Ya lanzaron su Icebreaker original en Kickestarter y fue todo un éxito. Se puede adquirir en su ecommerce, por si te interesa, pero veamos su último producto, que aún se encuentra en fase de financiación.
Como te decía antes, el Icebreaker es un producto sencillo. Se compone de un molde de silicona con capacidad para 18 cubitos de hielo en el que hay una única abertura tanto para introducir el agua como para sacar los propios cubitos una vez creados.
El proceso para hacerlos es realmente sencillo. Solo hay que rellenar el molde por la abertura, cerrarla y guardarla en el congelador al menos durante 6 horas. Ya para empezar vemos que no tenemos el problema de derramar agua por toda la cocina. Punto para Icebreaker.
Para sacar los cubitos solo habrá que tirar de dos bandas laterales para despegarlos, abrir su tapón y vertir los cubitos al gusto. Se acabó el pelearnos con la cubitera, el coger los cubitos con las manos y la posibilidad de contaminación cruzada.
Tiene un extra interesante ya que nos podremos llevar nuestra Icebreaker con nosotros si tenemos algún tipo de evento fuera y por si sola mantendrá los cubitos en plena forma durante unas 3 horas. Para aquellos que necesiten un poco más de tiempo, la gente de Icebreaker ha creado una mochilla especial donde podremos almacenar varios Icebreaker durante 12 horas. Ideal para fiestas en la playa.
Parece que el negocio del hielo tiene tirón, ya que aún con la campaña abierta, la gente de Icebreaker lleva recaudados más de 50.000 € para financiar su cubitera. Por 23€ aún puedes hacerte con la tuya.
Ideas de frigorifico
Aprovechando el tema de hoy, se me ha ocurrido que podríamos hacer un pequeño brainstorming de posibles ideas que tengan relación con la nevera. Si lo piensas, es un objeto al que le damos muchos usos y estoy seguro de que hay muchos “problemas” por arreglar.
Tapas adaptables para tuppers: Ya te he hablado alguna vez del gasto en plástico que supone tapar cada recipiente que metemos al frigorífico. En su día te hablé de un producto moldeable que se podía utilizar precisamente para esto, aunque estoy seguro de que se puede mejorar. Buscando en la red me he encontrado con varios tipos de tapas adaptables, algunas de ellas incluso inteligentes, ya que se podían conectar con tu teléfono y darte información. Creo que hay mercado ya que es un pain que aún no se ha acabado de solucionar, y junto con la mayor concienciación del usar menos plásticos, puede ser un buen nicho de mercado.
Organizadores de frigorífico: Uno de los problemas que nos encontramos en las neveras en los difícil que resulta en ocasiones organizar y colocar los productos. He encontrado algún proyecto en Kickstarter en el que proponen adaptar una especie de gancho con diferentes baldas para lograr un mejor aprovechamiento del espacio a la vez que se organiza todo de una forma más ordenada. Estoy convencido de que aún se puede mejorar mucho en este aspecto.
Elemento de comunicación: El frigorífico puede servir como un elemento de comunicación muy potente. ¡La de veces que pasamos delante de él! Ya existen imanes en forma de organizadores, con calendarios y espacios para anotaciones, pero estoy seguro de que se puede indagar más y encontrar nuevas ideas enfocadas en temas concretos. ¿Organizador para padres? ¿Lista de la compra? Se podría enfocar el diseño en alguna necesidad muy específica.
Jugar con el frigorífico: Hace tiempo vi un producto llamado Fridgepong que básicamente convertía a tu frigorífico en una diana para dardos magnéticos. Si le das varias vueltas, habría varias maneras de que tu frigorífico se transformara en un elemento lúdico.
Estas son solo algunas ideas con las que empezar a imaginas nuevos productos en torno al frigorífico. Ahora te toca a ti sentarte frente al tuyo e imaginar como podrías mejorarlo, ¿te atreves?