Hoy vamos a hablar de la que es quizá mis estrategias de marketing favorita, que no es otra que el marketing de contenidos. Si te fijas, estamos bombardeados de publicidad, y en la mayoría de los casos ni siquiera nos interesa y nos molesta “cosa mala”. En cambio, si hay algo que buscamos activamente, es contenido, o lo que es lo mismo, información, y a poder ser que sea de calidad y que nos resuelva algún problema o nos dé la información que necesitamos. Veamos algo más a fondo en que consiste el marketing de contenidos y algunos tips para crear una estrategia ganadora para tu proyecto.
¿Qué es el marketing de contenidos?
Podríamos definir el marketing de contenidos como una estrategia mediante la cual creamos contenido de valor para nuestra audiencia y del que se pueda beneficiar. Con esto conseguiremos lograr credibilidad, ser vistos como expertos y, finalmente, podremos dirigir al usuario hacia una acción final (que nos compren, que se apunten a una newsletter, etc.)
El marketing de contenidos puede crearse de muchas formas de cara a la forma en la que será consumida la información que proporcionemos. La forma más “tradicional” siempre ha sido el formato blog, y desde luego es algo que sigue funcionando, ya que permite a Google saber de lo que hablamos y mostrarlo cuando sea conveniente. Pero cada vez hay más formas de hacer marketing de contenidos, como pudiera ser este mismo podcast, vídeos en YouTube, contenido para Instagram, post en Facebook, en Linkedin… ¡sobran los formatos!
¿Mola o no mola el marketing de contenidos?
Cómo todo en esta vida, el marketing de contenidos también tiene sus facetas positivas y negativas. Hagamos un repaso a las más importantes:
Ventajas
No necesitas invertir dinero: Cualquiera puede comenzar a crear una estrategia de marketing de contenidos sin invertir ni un Euro. Ni siquiera necesitas una web propia, ya que como hay tal cantidad de maneras de crear dicho contenido, las elecciones gratuitas sobran.
Vas a aprender mucho: Uno de los beneficios inesperados y que mucha gente no valora lo suficiente es el tema del aprendizaje que proporciona seguir esta técnica. Si quieres publicar algo sobre un tema determinado, tendrás que informarte, mirar varias fuentes, estudiar por tu cuenta… en definitiva, que lo que quizá empezaste para posicionarte como experto dentro de un área puede que te convierta propiamente en experto. Eso si, estoy presuponiendo que vas a crear contenido válido y de calidad, y no te vas a inventar todo. Si es así, olvida todo lo que he dicho.
Podrás mostrarte como un referente en el sector: Si quieres ganarte la confianza de tu público, ¿qué mejor manera que demostrar tus conocimientos compartiéndolos? Para ello no crees contenido “a saco” que vaya en la búsqueda de la vente. Comparte lo que sabes con el fin de ayudar a los demás. Puede que alguien llegue a tu contenido, le soluciones un problema pero no te acabe comprando. No pasa nada. La cuestión es que ya estás metido en su cabeza. Ahora eres uno de sus referentes para cierto tema. Cuando llegue el momento y te necesite o conozca a alguien que necesite lo que tu ofreces, aparecerás en sus recuerdos como aquel que tanto sabe de dicho tema y estarás posicionado en el primer lugar como candidato al que comprar.
Inconvenientes
Sus resultados llegan a largo plazo: Mucha gente no llega a ver los resultados del marketing de contenidos porque directamente abandonan antes de tiempo. Esta estrategia requiere tiempo y paciencia, mucha paciencia, algo de lo que cada vez vamos más escasos. Según sea el tipo de contenido que crees, puede que un contenido que hayas creado una vez de siga dando frutos durante incluso años. Creeme, es una inversión en la que merece la pena invertir tu tiempo.
Hay que invertir bastante tiempo: Acabamos de hablar del tiempo que requiere ver los frutos de la estrategia de marketing de contenidos, pero también requiere una inversión de tiempo en cuanto a su creación. Esto puede quemar a mucha gente, porque entre no ver resultados a corto plazo y el esfuerzo que supone crearlos… puede llegar a frustrar. De nuevo te recomiendo lo mismo, paciencia y trabajo.
Puede resultar complicado para muchos: A mucha gente de cuesta crear contenido por diversas razones: No se expresan bien, no quieren exponerse, no son constantes, etc. Si, puede haber muchos “peros”, pero no hay excusa. En las claves que te doy a continuación veremos como salvar este tipo de situaciones.
La clave del marketing de contenidos
Una de las claves del marketing de contenidos es la relación que se genera entre el usuario y el creador del contenido. Esa relación no se consigue con publicidad pagada ni de lejos. En mi caso consumo mucho contenido de diversos creadores, como por ejemplo Boluda. El hecho de escuchar su podcast cada día desde hace años hizo que se creara esa relación de la que te hablo, y que fuera mucho más fácil pagar por sus cursos o sus productos.
Si tuviera que apuntarme a unos cursos simplemente porque me sale una publicidad en Facebook o porque he encontrado una web que los ofrece… si los necesito no digo que no los vaya a comprar, pero vamos, entre las opción de comprar a alguien con el que has creado una relación o a un completo desconocido… tú ya sabes que elegirías.
Cómo hacer marketing de contenidos sin morir en el intento
Te voy a dar unos tips para que te pongas desde ya a crear tu estrategia de marketing de contenidos y evites caer en algunos errores graves en los que yo mismo he caído en su momento:
Elegir el medio en el que mejor te desenvuelvas
Muchas veces, antes siquiera de dar el primer paso, ya nos estamos complicando la vida. Queremos elegir todas las opciones y acabamos desbordados y sin dar el primer paso. Lo más práctico al comenzar es elegir un medio, el que te sea más sencillo y amigable, y comenzar a crear.
Si te gusta o te es fácil escribir, ponte con un blog. Si se te da bien hacer vídeos, pues elige YouTube. Da igual la plataforma por la que comiences. El caso es que empieces y te sientas bien haciéndolo. Cuando te vayas asentando, ya habrá tiempo de plantear otras opciones y aumentar los medios en los que crear contenidos, pero el caso es empezar con uno.
La consistencia es clave
Cuando empezamos algo nuevo tendemos a “fliparnos” demasiado y a ponernos metas que son quizá un poco… irreales. Los objetivos debes ser alcanzables, y si quieres crear contenido con cierta periodicidad, planteate si realmente estás en disposición de hacerlo. Bueno, más que planteártelo, empieza en “falso” a crear contenido (sin compartirlo) para probarte a ti mismo. Estate al menos un mes y luego reflexiona sobre como te has sentido. ¿Has tenido tiempo? ¿El contenido era suficientemente bueno con ese ritmo?
A mi me paso con este podcast. Empecé con un episodio diario y pronto me dí cuenta de que el ritmo era más exigente de lo que creía. Al final me adapté, pero no sin pasarlo mal.
Lo mejor es que empieces con un ritmo asumible para ti y, si quieres aumentarlo, hazlo cuando sientas que de verdad puedes hacerte cargo sin fallar.
Publicar con cierta frecuencia es bueno, pero no sacrifiques calidad ni a ti mismo.
Contenido de valor para el público adecuado
En último lugar está el tema del valor del contenido. Hay gente que es un poco celosa con lo que comparte, y se guarda algunos “secretos” porque piensa que está dando demasiado.
Es como las ideas y los emprendedores, que parece que por compartirlas se las van a robar. Nada más lejos de la realidad. Compartir lo mejor que tienes te posicionará aún más como experto y traerá más clientes a tu negocio.
Por mucho que cuentes como hacer las cosas, o que digas al mundo esa gran idea que has tenido, ya sabes como somos los humanos. Se nos va la fuerza por la boca y gente que de verdad pase a la acción… hay muy poca.
A parte de compartir lo mejor que tengas, hazlo hablándole a tu público objetivo. Y maneras y “maneras” de hablar con tu audiencia. Si ya tienes tu buyer persona creado, sabrás exactamente qué información necesita y cómo la quiere recibir.