NED #42. Hablemos de Side Projects y newsletter en camino

Hoy vamos a hablar de un tema que siempre surge entre cualquier emprendedor. Una vez tengas tu proyecto en marcha, por muy bien que te vaya, siempre aparece el “gusanillo” de empezar nuevos proyectos. Incluso más allá del beneficio económico (que también) la cuestión es que parece que nos apetece pasar por el desarrollo de una nueva criatura. Supongo que será algo que también les ocurre a muchos padres. Una vez tienen el primero y ya se han amoldado a la situación, en normal que aparezcan las ganas de ir a por el segundo.

Aquí es donde entran en juego los denominados side projects, o proyectos paralelos. Lo cierto es que esto de los proyectos paralelos se pueden enfocar, al menos, desde dos puntos de vista diferentes:

  • Empleado por cuenta ajena al que le pica la curiosidad de “emprender en pequeñito”, creando un proyecto que pueda compaginar con su trabajo.
  • Emprendedor que tiene la cabeza llena de ideas y la necesidad de seguir creando, rompiendo cosas y volviendo a crear.

Creo que sea cual sea la situación en la que te encuentres, en la mayoría de los casos siempre suele ser una buena idea tener un proyecto paralelo:

  • Te hace comprometerte con algo nuevo.
  • Te obliga a pisar nuevos terrenos, a ensuciarte… y a aprender muchísimo.
  • Puede que te vaya muy bien y se convierta en tu proyecto principal o en tu nueva forma de ganarte la vida.
  • Si te va mal, tendrás nuevo material para tu portfolio de fracasos. ¡Todo el mundo debería tener uno!

Vale, los side projects molan, ha quedado claro. ¿Qué ocurre entonces en la vida real? El otro día vi una viñeta que lo explicaba perfectamente. Aparecía un emprendedor con una planta. Estaba llena de vida y reluciente. La planta tenía una gran sonrisa y se la veía feliz (no me preguntes porqué una planta tiene cara, cosas de la vida).

El emprendedor abrió la puerta y colocó la planta en una mesa en la que ponía “side projects”. Sobre la mesa había toda una colección de plantas, derroidas, marchitadas… que aún mantenían una sonrisa un tanto tétrica, quizá debido a la esperanza de que algún día serían recogidas para ver la luz.

Y es que esto es lo que pasa con la mayoría de side projects. Un día tienes la idea, te motivas, incluso comienzas a crear la web, pensar el nombre… pero claro, un side project requiere de tiempo. Tiempo para crearlo y, sobre todo, tiempo para mantenerlo. Particulamente lo que más me preocupa es el tiempo de mantenimiento. Lanzar un proyecto simplemente por probar y dejarlo morir por no atenderlo es todo un crimen.

Es posible que es side Project sobre el que tanto te he dado la lata, Escuela Emprende (ya no se llama así, pero bueno) no haya visto la luz precisamente por eso, por el tiempo de mantenimiento. Aunque igualmente eso se puede interpretar como escusa. Un proyecto debe lanzarse, y punto. Cuando se tenga el producto mínimo viable hay que tirar para adelante y centrarse en detectar si hay interés en él o no.

Otro problema con los side projects es el tema de complicarse demasiado. Me explico con mi propio ejemplo: Debido a las ganas de crear algo que aporte mucho valor, le doy vueltas a como implementar más funciones y características en Escuela Emprende. Que si una comunidad, foros, directos, formación… ¡pero vamos a ver! Primero habrá que lanzar centrándose en la funcionalidad core del negocio, ya luego vendrán las nuevas características y todo lo que quieras, pero lo importante es lanzar de una forma simple y sostenible, ya que sino pasa lo que pasa, que te quedas pensando hasta el infinito.

Y bueno, menudo rollo que te estoy metiendo con el asunto de los side projects. Podría hablar más y mejor en otro episodio. Si te interesa, házmelo saber.

Por otra parte, quiero darme una patada a mi mismo para reaccionar con algunas cosas que he hablado por aquí y después no he puesto en marcha. Sigo dándole vueltas al asunto de crear una newsletter. Estoy enganchado a muchas y la verdad, el formato me mola bastante, así que quiero lanzar la mia de una vez. Me voy a poner de fecha para esa primera newsletter el domingo 10 de Noviembre, y la idea es que sea semana.

Si aún no estás apuntado, te dejo el link en las notas del programa o simplemente visita alvaroflecha.com/blogcast y verás el cajetín de suscripción en la parte derecha.

Voy a “dar la tabarra” toda la semana que viene con este asunto, a ver cuantos os apuntáis.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *